UAQ y Universidad de Nápoles desarrollan Bioempaques

REDACCIÓN

@Capital_Qro La Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ) en cooperación con la Embajada de Italia en México, la Universidad de Nápoles Federico II y el Centro de Investigación y Estudios Avanzados (Cinvestav) llevaron a cabo, en el Parque Biotecnológico, el primer “Mexico-Italy Joint Workshop”; esto en el marco de las cooperaciones bilaterales que tienen ambos países en cuanto a recubrimientos multifuncionales y nanocompuestos para aplicaciones alimentarias y sanitarias.

En este sentido, el rector de la Máxima Casa de Estudios de la entidad, Gilberto Herrera Ruiz, dio la bienvenida a todos los asistentes a esta actividad y agradeció los aportes de todas las instituciones involucradas en estos proyectos cooperativos, “el objetivo de este Workshop es compartir los avances científicos dentro de una industria muy importante como lo es la alimentaria, rubro en el cual ambos países tienen tiempo trabajando para introducir mejores y más saludables productos al mercado“. Asimismo, Carlos Regalado González, profesor Investigador de la Facultad de Ingeniería de la UAQ y responsable del proyecto de empaques biodegradables con materiales comestibles pormenorizó que con financiamiento de la Agencia Mexicana de Cooperación Internacional para el Desarrollo AMEXCID, desde 2015 se ha estado trabajando en el desarrollo de estos empaques con la finalidad de aumentar la calidad de los alimentos, así como su inocuidad.

“Estamos incorporando a estos empaques aplicaciones con diversos materiales, tales como nanopartículas de plata, de sílica mesoporosa y de arcilla, además le agregamos la encima transglutaminasa que están produciendo en Nápoles, para mejorar las propiedades mecánicas y de barrera de los alimentos”. Por su parte, Prospero Di Pierro, responsable de este proyecto de cooperación con la UAQ en la Universidad Federico II, presentó una ponencia en la que explicó los detalles de los tres años de cooperación científica entre estos países. Aseveró que lo que han buscado son nuevas maneras de aumentar la calidad de los alimentos a través la expertise de cada institución.

“La finalidad de este proyecto es buscar nuevas proteínas biodegradables para los empaques de los alimentos, las cuales ayuden a prevenir su oxidación y que posteriormente los desechos de los envoltorios puedan biodegradarse de mejor manera y en menor tiempo”, subrayó.

El Di Pierro agregó que, durante este tiempo, se han generado movilidades y estancias académicas de alumnos de posgrado de ambas instituciones que están involucrados con estos proyectos, a quienes se les ha brindado acompañamiento teórico-práctico y toda la asesoría científica.