A mes y medio de la muerte del gorila Bantú, la secretaria del Medio Ambiente capitalino, Tanya Müller, compareció ante la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, donde entregó el informe final de los especialistas sobre la necropsia del primate. Esto fue lo que dijo:
– No hubo sobredosis de anestesia durante su inmovilización. – Dosis y medicamentos, entre protocolo mundiales. – No se utilizaron fármacos indebidos o ilegales. – Murió a causa del padecimiento cardiaco que lo aquejaba. – Era necesario su desmembramiento durante la necropsia para poderlo incinerar. – El tipo de enfermedad que padecía, era difícil de detectar.
Además, en la reunión, aparte de declarar que el grupo de expertos de la UNAM, el Semefo y un laboratorio especialista en gorilas de San Antonio, Texas, no recibió pago ni retribución por sus resultados, Müller reconoció que ya habían pasado 6 años desde el último chequeo médico que le hicieron.
FCL