El parque natural Xcaret tiene un lugar de ensueño, que permite presenciar uno de los espectáculos más grandes de la naturaleza.
Se trata del mariposario, donde los visitantes pueden admirar un sinfín de mariposas volar entre cascadas, riachuelos y una imponente vegetación.
Esta zona de conservación está diseñada para ser el hogar de una especie valorada desde tiempos prehispánicos, cuando los antiguos aztecas consideraban que en sus frágiles cuerpos habitaban almas de guerreros caídos en batalla.
El mariposario de Xcaret tiene un área de vuelo libre de tres mil 500 m2 de superficie y 15 metros de altura, lo que lo convierte en uno de los más grandes del mundo.
Este recinto exhibe únicamente especies de la región en su hábitat natural y reproduce 20 especies diferentes.
YC/BPG