Un grupo de científicos australianos de la Universidad de Queensland decidió evaluar el estado actual de una especie de roedor llamado Melomys rubicola, y luego de dos años de investigación, llegaron a la conclusió de que, lamentablemente, éste pequeño mamífero estaba extinto.
Debido al cambio climático, el hábitat de este roedor (El Cayo Bramble) sufrió un cambio en los niveles del agua y eso provocó que poco a poco el pequeño animal sintiera el impacto.
Los expertos de esta investigación afirman que la causa es antropogénica, es decir que el cambio climático que está directamente relacionado con la intervención del ser humano.
MASR